sábado, 23 de marzo de 2013

Corporación policial bonaerense

Alberto Sobrado y Luis Vicat son comisarios retirados de la Bonaerense y, por cierto, bastante distintos.

El primero era apreciado entre los oficiales de la línea dura y estuvo al frente de la fuerza en agosto de 2002.

Vicat era un uniformado atípico y encabezó desde octubre de 1996 –luego del escandaloso desplazamiento del comisario Pedro Klodczyk– el Área Especial de la Secretaría de Seguridad, encargada de investigar a los altos dignatarios de la la Maldita Policía, algo que sus camaradas jamás le perdonaron.
Ahora sus nombres vuelven a tener notoriedad: Sobrado acaba de ser beneficiado (?) por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº 1 de La Plata con una increíble absolución en una causa por enriquecimiento ilícito. En la misma ciudad, el TOC Nº 3 comienza a juzgar a Vicat por malversación de fondos públicos.
Situaciones diferentes pero con un mismo denominador común: el oscuro vínculo entre los jueces de la provincia y la corporación policial.

Hay una anécdota de Vicat en la Comisaría 1ª de Avellaneda en el año '96, que respondían al comisario Mario "Chorizo" Rodríguez (delfín de Klodczyk):
El jefe de aquella seccional, comisario Fausto Cabello, se hallaba enfrente, de espaldas a la dependencia, conversando con un narco que acababa de entregarle un ladrillo de cocaína. Este, de pronto, enarcó las cejas al ver a los hombres de Vicat, que corrían en sincronía y con fusiles automáticos hacia la sede policial.
En ese instante, apuntó una pistola sobre los genitales del tembloroso comisario, recriminándole: "¡Hijo de puta, me entregaste!"
La respuesta fue: "¡Vos estás loco!"
El narco bajó el arma, y dijo:
"Entonces, boludo, te están tomando la comisaría."
El policía volteó la mirada, antes de correr con premura a su lugar de trabajo.
El sitio fue tomado por Vicat sin derramamiento de sangre.

A semejanza de algunos arrabales, ciertas zonas de la justicia son tierra de nadie.

Fuente: Ricardo Ragendorfer - Página 18